Los organismos constitucionales autónomos son órganos de control del poder y producto de la evolución del principio de división de poderes, afirmó el Consejero Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello.
Al intervenir en el panel 1 del 11º Seminario Internacional Estado de Derecho(s) y combate a la corrupción en América Latina, titulado Instituciones autónomas y derechos fundamentales, explicó que en México todos los órganos constitucionales autónomos cumplen funciones que son eminentemente técnicas y que, por lo tanto, “deben estar sustraídas al ejercicio a partir de determinadas visiones o posturas políticas”.
En este sentido, estableció que la división de poderes y los organismos constitucionales autónomos buscan fortalecer los controles y contrapesos del poder. “Y es que los órganos autónomos son órganos de control, como también son los poderes en su recíproca interacción en una lógica de una democracia constitucional”, enfatizó.
En México, precisó el Presidente del INE, los organismos constitucionales tienen una característica en particular: “son uno de los productos que, en buena medida permitieron encauzar la transición a la democracia”, es decir, surgieron como una manera de democratizar el sistema político a partir de la sustracción de atribuciones que originalmente estaban en el gobierno.
“Todos los órganos constitucionales autónomos en el país ejercen funciones que antes, en el presidencialismo autoritario del régimen del siglo pasado, se cumplían por el gobierno”, recordó. Todos estos órganos nacieron“como una manera de erosionar ese hiperpresidencialismo que constituía el problema fundamental a resolver para democratizarnos”.
Córdova sostuvo que todo intento por reforzarel Ejecutivo en México y en el mundo es un fenómeno claramente antidemocrático y, en este sentido, regresivo.
“Los órganos constitucionales autónomos, por su propia definición, son incómodos al poder de cuyas atribuciones se sustrajeron y que es objeto justamente de la función de control que desarrollamos”, subrayó el Consejero Presidente del INE.
Esta función de control, detalló, no es solamente una de auditoría,“es también una función de garantía de derechos, precisamente porque la lógica misma con la que surge el constitucionalismo moderno es el control y la regulación de poder para garantizar las esferas de libertad”.
En este contexto, planteó ¿por qué es importante un órgano que organiza elecciones y que no esté sometido a los designios y las intenciones políticas de un órgano del Estado o de algún partido, autonomía e independencia? “Precisamente para poder garantizar el efectivo cumplimiento y ejercicio de los derechos políticos y lo mismo vale para el derecho a la información o el derecho a la libre competencia”.
Córdova Vianello compartió este panel con el Auditor Superior del Estado de Jalisco, Jorge Alejandro Ortiz y la Comisionada del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Norma Julieta del Río Venegas. El panel fue moderado por el Director de Proyectos de Estado de Derecho del World Justice Project, Alejandro González.
México está viviendo un fenómeno creciente de privatización y diversificación del uso de la violencia, afirmó el Consejero Ciro Murayama Rendón, durante el panel 2 delSeminario Internacional, titulado Procesos electorales: el desafío de la violencia.
En este escenario, recalcó, “los estados están siendo incapaces y, peor aún, renunciando a su misión del ejercicio del monopolio de la fuerza para garantizar la seguridad de los integrantes del Estado”.
Por su complejidad y su gravedad, Murayama apuntó que este asunto no se puede minimizar, pero tampoco generalizar. “Es decir, nos tenemos que acercar de la manera más objetiva posible”.
INE no tiene atribuciones en materia de seguridad
Al referir la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) por la que ordena al INE crear una política electoral nacional para prevenir factores de riesgo de violencia electoral, el Consejero Murayama dejó en claro que el Instituto no puede recuperar, generar ni transmitir información sobre seguridad nacional.
“La tarea del INE es otra. Esta es la autoridad electoral administrativa del mundo con más tareas encomendadas. No sobrecarguemos su responsabilidad y menos en un campo donde no tenemos una sola persona con experiencia en la materia y donde se puede arriesgar la vida”, exhortó Murayama.
Lo que sí hace el INE, expuso, es trabajar con las fuerzas de seguridad para coordinar cómo se llevarán los paquetes electorales a los distritos, cómo se van a repartir a los presidentes de casilla y que ayuden al Instituto en las tareas de asistencia electoral para recuperar los paquetes y llevarlos a las oficinas donde se realiza el cómputo.
El Consejero Murayama concluyó que la violencia, toda, ha crecido en el país; las elecciones ocurren en ese contexto y siguen siendo abrumadoramente un acto donde se ejercen derechos; es un riesgo para el Instituto que se le pida generar información sobre seguridad; no tiene atribuciones ni capacidad para enfrentar la violencia criminal. “El INE es sólo una institución civil y así debe seguir”, insistió.
Murayama Rendón compartió el panel con el Especialista Principal de evaluación de la democracia de IDEA Internacional, Miguel Ángel Lara; el Director del Programa Regional del National Democratic Institute (NDI) para Centroamérica, Eduardo Núñez; la Consejera Presidenta del Instituto Electoral de Participación Ciudadana de Jalisco, Paula Ramírez Höhne y la Magistrada de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Janine Otálora.
Este panel fue moderado por el Director Ejecutivo de Capacitación Electoral y Educación Cívica del INE, Roberto Heycher Cardiel Soto.