RECUERDA IZC LA IMPORTANCIA DE LAS TRADICIONES DE DÍA DE MUERTOS

El Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde” se unió a las actividades del Festival de Día de Muertos “Fray Joaquín Bolaños”, Somos Cultura, al transformar la calle Doctor Hierro de la capital zacatecana en un portal que traspasó el umbral de la riqueza cultural de nuestras tradiciones, con la presentación y exhibición del arco y tapete tradicional «El Mictlán» y un concierto del tradicional Canto Cardenche.

Dentro de la suma de esfuerzos por mantener vivas nuestras tradiciones de Día de Muertos, por varias dependencias de la administración que encabeza el Gobernador David Monreal Ávila, en el marco del Año de la Paz, el IZC instaló el arco y tapete tradicional «El Mictlán», pieza que formó parte del Tercer Concurso de Arcos y Decoraciones de Fachadas y Espacios de Día de Muertos 2024, organizado por el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF).

La instalación fue presenciada por el mandarario estatal David Monreal Ávila y su esposa, la Presidenta Honorífica del SEDIF, Sara Hernández de Monreal; el Sectetario de Turismo del estado de Michoacán, Roberto Monroy García, y su homólogo en la entidad, Le Roy Barragán Ocampo, quienes estuvieron acompañados de la Directora General del IZC, María de Jesús Muñoz Reyes.

Coordinado por la Unidad Estatal de Culturas Populares del Instituto Zacatecano de Cultura y respaldada por el Ayuntamiento de Villa García, el relato visual de la mitología Mexica representó los nueve niveles del inframundo; cada sección del arco simbolizó las pruebas que deben superar las almas en su camino hacia el descanso eterno.

Desde el cruce del río, guiados por un xoloitzcuintle, hasta la neblina del noveno nivel, el arco fue un recordatorio de la dualidad entre la vida y la muerte, en la cosmovisión indígena.

La atmósfera se enriqueció con el concierto de canto cardenche serrano «La noche llegará», interpretado por las Mujeres cardencheras de Durango, originarias de la Sierra Madre Occidental, que trajo hasta el centro histórico de la capital zacatecana la riqueza de la tradición oral de esta parte del norte del país.

Así, con voces que han atravesado generaciones, estas artistas compartieron anécdotas y melodías que hablan de la vida cotidiana y la conexión con la naturaleza. Su repertorio, que abarca tanto lo religioso como lo secular, mostró la esencia del canto cardenche: una expresión auténtica de la identidad comunitaria que desafía las convenciones musicales, al construir una experiencia auténtica y emocional.

Las intérpretes, cuyas trayectorias se remontan a 1985, lograron crear una atmósfera mágica que resonó entre el público que se dio cita en este espacio y en el patio central del Museo Zacatecano. La polifonía empírica y las letras que narran las vivencias de la comunidad hicieron que el público no sólo escuchara, sino que viviera cada historia y cada melodía de manera especial.

La combinación de la exhibición del arco «El Mictlán» y el concierto de canto cardenche fue un tributo a las tradiciones que dan vida y significado al Día de Muertos, un acontecimiento en el que el Instituto Zacatecano de Cultura no sólo celebró la memoria de los que han partido, sino que también fortaleció el sentido de comunidad y pertenencia entre los asistentes, a quienes recordó la belleza y la importancia de nuestras raíces culturales.

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