En sesión ordinaria, LXV Legislatura del Estado de Zacatecas aprobó el dictamen presentado por la Comisión de Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres, presidida por la diputada del Partido del Trabajo, Renata Ávila Valadez, mediante el cual se exhorta a las y los integrantes de los Ayuntamientos de los 58 municipios del estado, así como a las y los servidores públicos de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial y de los órganos autónomos, a incorporar el lenguaje incluyente y no sexista en sus actuaciones.

El punto de acuerdo, presentado por la diputada Ruth Calderón Babún, tiene como finalidad visibilizar y reconocer la participación de las mujeres en los espacios de toma de decisiones, erradicando prácticas discriminatorias que perpetúan estereotipos y desigualdades de género.

Durante la discusión en el Pleno, Ávila Valadez, subrayó que referirse a las mujeres que ocupan cargos como síndicas, regidoras o presidentas municipales en su denominación femenina, no solo es un acto de reconocimiento, sino una forma concreta de combatir la violencia simbólica y la invisibilización histórica que han enfrentado las mujeres en el ámbito político.

“la violencia política simbólica contra las mujeres en política busca deslegitimarlas a través de usos y estereotipos de género que niegan su competencia y visibilidad en la esfera política”, dijo. Por ello, insistió en la necesidad de “dirigir los esfuerzos hacia el ejercicio de la función, donde la violencia simbólica sigue presente”.

En el dictamen, señaló, se deja en claro que el lenguaje no es neutral, sino una construcción social que refleja y moldea la percepción de la realidad. Por ello, se destacó la importancia de su uso incluyente y no sexista como un paso fundamental hacia la igualdad sustantiva entre mujeres y hombres.

La legisladora, recordó que la Ley Orgánica del Municipio del Estado de Zacatecas ya contempla el reconocimiento de los cargos en su versión femenina y masculina, por lo que el uso del lenguaje adecuado es también una obligación jurídica y ética de quienes integran la función pública.

Asimismo, se hizo un llamado a los tres poderes del estado y a los órganos autónomos para que revisen y actualicen sus normativas internas, manuales administrativos y protocolos de comunicación, a fin de garantizar el respeto al lenguaje incluyente y libre de estereotipos de género.

Finalmente, la LXV Legislatura hizo un llamado a los servidores públicos para “abstenerse de emitir comentarios o actitudes que constituyan violencia simbólica contra las mujeres, ya que vulnera su esfera de derechos e impide el ejercicio libre y digno de su cargo como Presidentas, Síndicas, Regidoras y demás cargos públicos ejercidos por mujeres”.