Como parte de la campaña Compartiendo Esperanza en una suma de esfuerzos entre el Ayuntamiento de Zacatecas, el Banco de Alimentos y la Universidad Autónoma de Zacatecas, esta mañana de martes se hizo entrega de más apoyos alimentarios en la colonia El Jaralillo, donde familias de escasos recursos se vieron beneficiadas; así lo informó el alcalde capitalino Ulises Mejía Haro refrendando su compromiso de apoyar a quienes más lo necesitan durante esta contingencia por el COVID-19 en la Capital.
Durante la entrega de estos paquetes alimentarios el presidente municipal reconoció la labor realizada por parte de los colaboradores de Desarrollo Social del Ayuntamiento que en coordinación con el Banco de Alimentos y de las Brigadas de Activación Social (BAS) de la Universidad Autónoma de Zacatecas que han visitado los sectores vulnerables llevando este apoyo.
Por su parte María de Lourdes Delgadillo, Secretaria de Desarrollo Social en Zacatecas informó que durante esta semana se estará atendiendo a las Zonas de Atención Prioritaria (ZAP) de las colonias Jaralillo I y II, Filósofos, Lomas de Cristo y España para la entrega de despensas con total transparencia pues, «en este proceso contamos con la participación del Instituto Zacatecano de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IZAI); la Secretaría de la Función Pública (SFP); el Observatorio Ciudadano de Mejora Regulatoria, la Comisión de Vigilancia de la Legislatura del Estado y la Secretaría de la Contraloría Municipal de Zacatecas», explicó.
«Es importante Verificar que se entreguen en mano propia los apoyos y es así, conjuntando esfuerzos como se puede lograr mucho más» comentó José Villagrana en representación se los brigadistas de la UAZ ahí presentes, agradeciendo el apoyo y apertura del presidente y su equipo de trabajo para ampliar los beneficios a la gente de estos polígonos.
El primer edil, también presidente nacional de la Red Mexicana de Municipios por la Salud, explicó que “estamos fortaleciendo estas estrategias en varias vertientes, por una parte con la entrega de canasta básica de alimentos y despensas a grupos vulnerables y de alto riesgo de contagio, como adultos mayores de 60 años, madres jefas de familia y personas con discapacidad, pero también a familias que enfrentan algún grado de vulnerabilidad o viven en zonas de atención prioritaria”.